Tras las increíbles imágenes que nos dejó la jornada de marcaje de la manta raya el año pasado, cinco embarcaciones volverán a zarpar este domingo, 10 de julio, del Reial Club Nàutic Port de Pollença para alejarse unas 10 millas al norte del Cabo de Formentor en busca de bancos de mantas rayas para observar y realizar, si es posible, el marcaje de esta especie marina con el objetivo de obtener más información sobre su comportamiento.
¡SIGUE NUESTROS PERFILES EN REDES SOCIALES Y DISFRUTA DEL MAR EN TU MÓVIL!Una jornada de navegación científica en la que participa el presidente de la Asociación Mallorquina de Pesca Recreativa Responsable (AMPRR), Bernadí Alba, además de investigadores de Save the Med, un biólogo del Great Tuna Race y el biólogo Ramón Moncil, experto en marcaje de tiburones blancos y mantas rayas en la zona del Pacífico, que viene expresamente desde México para ayudar en esta salida.
“Lo más complicado es encontrarlas”, explica Bernadí Alba. Una vez localizadas los expertos se tirarán al mar, a pulmón libre, al lado de las mantas. “Son unos animales muy inteligentes y curiosos. Son ellas las que vienen a investigar qué pasa”, reconoce el presidente de AMPRR.
El objetivo de los investigadores en esta jornada científica de observación y marcaje es ganarse la confianza de las mantas, nadando con ellas de una manera relajada, para si es viable colocarle una marca electrónica tipo “pop up”. Gracias a esta marca los científicos podrán saber a qué profundidades llegan y las zonas por las que se mueven estos animales marinos, para finalmente poder hacer un mapa con todo el recorrido que han realizado.
Además, los expertos tienen preparadas unas agujas especiales para recoger muestras biológicas, para realizar análisis de ADN y hacer comparaciones entre las poblaciones del mediterráneo occidental, el Atlántico, Índico… “porque hay muy pocos datos de estos animales y vamos a sacar el máximo de información posible de esta jornada” explica Bernadí Alba.
Una jornada de la que van aprendiendo año tras año y mejorando sus técnicas de marcaje. Y es que hace dos años ya se intentó marcar mantas en el mar balear, pero “la marca que llevábamos no era la adecuada y no se clavó”, comenta el presidente de AMPRR. Una experiencia que si tienen con el marcaje del atún, “así como con el atún ya tenemos mucha experiencia de cómo se tiene que hacer todo, con las mantas, como se realiza dentro del agua es más complicado” reconoce Alba. Por eso este año cuentan con un experto como el biólogo mexicano Ramón Moncil, que les podrá aconsejar sobre la técnica para realizar correctamente el marcaje de las mantas.
A pesar de estas complicaciones a la hora de poner la marca a las mantas rayas, de las jornadas realizadas el año pasado se sacó un dato muy curioso, “la manta se estaba alimentando a 600 metros de profundidad, y no se tenía constancia de que en el mediterráneo esta especie bajara tanto para alimentarse” reconoce Alba.
Una vez finalizadas las labores de marcaje, “si las mantas continúan con ganas de jugar, en grupos pequeños de biólogos e invitados de las barcas, tres o cuatro personas, se lanzan al agua y esperan si las mantas se acercan”. Y es que a veces, las mantas rayas, que pueden medir entre 5 y 7 metros de ancho, se acercan tanto que se dejan tocar.
“Esta experiencia es algo que te cambia el chip. Entiendes el mar de otra forma y haces lo que esté en tu mano para proteger estos animales”, confiesa Alba al recordar la primera vez que nadó con mantas rayas.