¿Has oído hablar del mar del diablo? Sumérgete en las misteriosas teorías del Triángulo del Dragón

El mar, con sus más de trescientos millones de kilómetros cuadrados, cubre más de un 70% de la superficie de la Tierra. Por eso no es de extrañar, que pese a los intentos de muchos navegantes de surcar esta vasta extensión marina, todavía haya muchos rincones por descubrir.

Algunas de estas áreas no son tan desconocidas por la sociedad y están rodeadas de misterio como el Triángulo de las Bermudas, donde ocurren extrañas desapariciones. Pero ¿sabías que Japón también tiene su propio enigma marino? Es el Triángulo del Dragón, también conocido como el mar del Diablo.

Este misterioso lugar se encuentra en el Pacífico, alrededor de la isla Miyake, al sur de Tokio. Aunque se han registrado numerosas desapariciones inexplicables en la zona, los japoneses no lo consideran más peligroso que otras aguas costeras de su país.

Las leyendas sobre la zona varían, y van desde relatos de dragones que acechaban para atacar a los barcos, hasta historias de buques fantasmas que secuestraban a las tripulaciones. Incluso se ha llegado a afirmar que el tiempo se detiene una vez te adentras en el triángulo. Sin embargo, más allá de estas historias fantásticas, lo cierto es que las desapariciones que han ocurrido en esta área oriental siguen sin una explicación clara.

Según los escritos del autor estadounidense Charles Berlitz, entre 1952 y 1954 Japón perdió cinco buques militares con un total de 700 personas a bordo. Consternados por este incidente, el gobierno japonés financió un navío con una tripulación formada con hasta 100 científicos para descubrir lo sucedido. Sin embargo, esta embarcación también desapareció, con todo el equipo de investigadores. Tras este suceso, Japón etiquetó el Triángulo del Dragón como zona peligrosa. 

No obstante, la investigación del escritor estadounidense Larry Kusche ofrece una perspectiva diferente. Según su investigación, los "buques militares" mencionados por Berlitz no eran más que barcos pesqueros, y en esa época era común perder este tipo de embarcaciones cerca de Japón. Además, Kusche sostiene que el buque de investigación no desapareció en el Triángulo del Dragón, sino que fue destruido por la erupción del volcán submarino Myōjin-shō, situado cerca del Mar del Diablo. También afirma que sólo iban a bordo 31 tripulantes, y que algunos restos del barco fueron recuperados.

Son muchas las teorías que han intentado explicar este fenómeno, pero la más aceptada es la del biólogo Ivan T. Sanderson y sus colaboradores de SITU (Society for the Investigation of the Unexplained), quienes sugieren que la Tierra tiene 12 zonas de perturbaciones geomagnéticas, algunas de ellas marinas, lo que podría explicar la alta frecuencia de desapariciones en ciertas áreas.

A pesar de las investigaciones y teorías existentes, la verdad tras este misterio sigue siendo confusa. ¿Se trata de un fenómeno natural, una anomalía geológica, o acaso hay un enigma aún más profundo e inexplicable detrás de todo esto? Es posible que nunca lo sepamos, porque no seremos nosotros quienes soltemos amarras desde nuestras Baleares para surcar esas aguas para averiguarlo. ¿Te atreves tú a navegar en el Triángulo del Dragón?