Banderas Negras para las bahías de Portmany y Fornells por contaminación y mala gestión

Ecologistas en Acción ha presentado este martes 17 de junio su informe 'Banderas Negras 2025', que recoge las afecciones ambientales más graves en el litoral español, y por el que se ha otorgado un distintivo a la bahía de Portmany por contaminación y otra a Fornells por mala gestión.

En el caso de la zona costera de Ibiza, los ecologistas aprecian contaminación por vertidos de aguas fecales, infradimensionamiento de las infraestructuras de depuración y mal estado del emisario, que redundan en la mala calidad del agua de baño.

La organización ha resaltado que en 25 años, la población de Sant Antoni de Portmany se ha duplicado y "no disponen de datos acerca del techo poblacional que puede alcanzarse en plena temporada estival".

De este modo, han asegurado que la bahía de Portmany sufre "episodios recurrentes" de vertidos de aguas residuales, debido a que la red de saneamiento "no se encuentra en condiciones" y se habría reparado el 75% del emisario, al agotarse precisamente este año la vida útil prevista para esta infraestructura.

"Su longitud es de 1.400 metros y a través de él se vierten los efluentes depurados en un 80%. Además, cuando se producen lluvias torrenciales, la capacidad de los sistemas de depuración queda desbordada y llegan al mar los caudales sin depurar", han incidido.

Por eso, han criticado que el Ayuntamiento de Sant Antoni, cuando hay algún vertido, "ni siquiera toma la decisión de cerrar las playas", con el "consiguiente riesgo sanitario para las personas".

Como solución han propuesto que se dote de un sistema de depuración y una red de saneamiento en condiciones, con "urgencia" y "en proporción a la población a la que dan servicio", con una capacidad de depuración "suficiente". No obstante, también han apuntado que se atiendan a otros factores, como pueda ser la capacidad de carga residencial del municipio, que "quizás también debería introducirse en la ecuación".

En cuanto a la bahía de Fornells, han resaltado que cuenta con unas características que la hacen "única" en el Mediterráneo español, por su carácter somero y resguardado, una peculiaridad "poco habitual", y que condiciona un hábitat "muy relevante" para especies como la Posidonia oceanica, la Cystoseira barbata, alga parda que solo existe en Fornells y Cala Teulera, o la Cymodocea nodosa. Además, en ella proliferan juveniles de varias especies ictiológicas.

Sin embargo, la entidad ecologista ha alertado que la ampliación del espigón del puerto de Fornells y la instalación de cinco nuevos pantalanes móviles supone una "agresión inconcebible en una rada única".

Por otro lado, supone aumentar la presión en un ecosistema tan "frágil" como este, con la "contaminación difusa" que se genera y los cambios de las condiciones ambientales al "alterar corrientes", algo que, a su juicio, es "a todas luces un despropósito".

"El desarrollismo de las últimas décadas ha extinguido los ecosistemas singulares de las bahías resguardadas y poco profundas para usarlas como puertos deportivos a lo largo de la costa mediterránea española, Fornells había resistido hasta ahora", han recriminado.

Asimismo, han detectado 70 amarres ilegales y un fondeo libre generalizado, a pesar de que existe un servicio de vigilancia pero no en  horas nocturnas.

El puerto lo gestiona Ports IB, mientras que el resto de la lámina de agua le corresponde a la Demarcación de Costas. De este modo, han aseverado que concurren circunstancias "especialmente graves", como son que las medidas compensatorias establecidas para la remodelación del puerto "no se estarían cumpliendo".

Tampoco se ha balizado la zona cercana a tierra donde el calado disminuye drásticamente. Asimismo, han apuntado que la instalación de boyas ecológicas en las calas cercanas, así como la delimitación y gestión de la zona de fondeo, "no parecen constituir una prioridad para las Administraciones concernidas".

Como medidas para mejorar la situación, han exigido un "cumplimiento riguroso" de las condiciones que han permitido la autorización de estos pantalanes, aunque parten de la base de que su instalación en una zona de "tan alto valor ecológico", pese a ser provisionales, resulta "más que cuestionable".

Así, han recalcado que con las condiciones ambientales se incorporaron cláusulas para que Ports IB pudiera derivar en el Comité Posidonia la instalación de 55 boyas fuera de la bahía de Fornells, por importe de algo más de 54.000 euros, la delimitación y gestión de la zona de fondeo permitido y la vigilancia diaria de fondeos durante el verano.

"A este respecto, resulta inadmisible que el Comité Posidonia cuestione que deban ejecutarse dichas instalaciones y que incluso se plantee la posibilidad de usar el dinero para otros fines", han recriminado.